Vivir con atención.

Practicar atención plena nos enseña a escuchar nuestro cuerpo, pensamientos, sentimientos. Logrando así la conexión con nuestro interno, ” La unión de cuerpo y mente” ayudándonos a percibir la vida y los problemas desde un punto diferente. Esto nos aproxima al bienestar interior con el bienestar exterior, logrando sentirnos en armonía y felicidad, otorgándonos también salud.
Cuando se aplica la atención  en el diario vivir y pasa a ser parte de nuestra vida, además de tener una conexión con los pensamientos y los sentimientos, vas aprendiendo a manejar la respiración, se aprende a traer calma y tranquilidad a través de ella, volviendo así a tu centro,  dejando cualquier estrés o  angustia,  vuelves a casa.
Cualquier sentimiento  que oscurece la mente, lo puedes reconocer cuando estás en atención plena y de esta forma se puede dejar, soltar. Al momento que se siente que vendra un pensamiento malo,  un enojo, una obseción, se observa,  se trae, se mira y suelta. Hay que soltar, soltar todo lo que nos inquieta, los miedos, preocupaciones, cuando soltamos, estamos liberándonos de apegos, que se han ganado ya sea por una idea o por un pensamiento, por el  pasado o por el futuro. También estamos conociéndonos, tomando conciencia de nuestras debilidades y aceptando cada una de ellas, dejando así cualquier atadura.
Una vez familiarizado con la atención, se puede complementar con cualquier tarea que se disponga hacer, aprendiendo a sentir la vida, aceptando lo difícil y viviendo cada segundo en el presente.
Se puede practicar la atención en todo momento, cuando caminamos, cuando meditamos, cuando comemos, cuando hacemos nuestras tareas diarias o en nuestra  practica de yoga.
En el yoga  toda la atención está en nuestros movimientos, vamos sintiendo como fluye la energía, como vamos liberando miedos y como  nuestro cuerpo se va relajando. Escuchamos nuestro cuerpo a través de los movimientos y va creciendo una linda amistad con nosotros mismos, vamos comprendiendo y vamos aceptando nuestros limites, nuestras debilidades.
Cada momento del día es una nueva oportunidad de practicar nuestra atención plena, como también cada día es  una oportunidad de vivir, de ser felices, poco a poco vamos comprendiendo que la vida es un milagro y que vale la pena saber vivirla.

0 que dicen...:

Publicar un comentario